UPANIC: El país urge de políticas de apoyo al sector agropecuario

Managua.-

El nuevo ciclo agrícola 2020-2021 está por comenzar y ante la actual pandemia del COVID-19 es urgente garantizar el funcionamiento óptimo en todos los eslabones que conforman la cadena agroalimentaria del país.
Los productores agropecuarios, sin distingo de tamaño o condición, estamos enfrentando altos costos de producción provocados por la carga tributaria de la reforma fiscal del 2019, el alza en los combustibles, el alto costo de los fertilizantes, la falta de desarrollo en la infraestructura productiva, los constantes incrementos en la tarifa eléctrica y la disminución del financiamiento de la banca comercial y las microfinancieras por la crisis sociopolítica que enfrentamos desde el año 2018, dicen los agropecuarios en un comunicado dado a conocer este lunes 27 de abril.
Todo lo anterior ha resultado en menores áreas de siembras y la reducción de las aplicaciones de fertilizantes e insumos vitales para proporcionar al cultivo, los nutrientes y la sanidad necesaria para su buen desarrollo, dando como consecuencia una disminución de la productividad.
Producto de esta situación, que se ha visto agravada por la pandemia del COVID-19, hoy más que nunca necesitamos asegurar mayores áreas de siembras y una mejor productividad en nuestros cultivos, continúan diciendo en el comunicado.
En este sentido, la agricultura y la ganadería, como actores claves para garantizar la seguridad alimentaria del país y el cumplimiento de nuestra matriz exportadora, requerimos de políticas públicas que permitan enfrentar de manera más eficiente las crisis que golpean a nuestros sectores.
Es por ello que en UPANIC urgimos a las autoridades correspondientes las siguientes acciones:

  1. Reducir la tarifa eléctrica y los precios de combustibles, este último, según la disminución de los precios del petróleo, para que el sector productivo y las familias nicaragüenses puedan tener un alivio económico y se priorice la producción y la compra de alimentos.
  2. Derogar las reformas a la Ley N°. 822, Ley de Concertación Tributaria, aprobada en el 2019, para permitir la recapitalización de muchas empresas familiares, incentivando la generación de puestos de trabajo de miles de familias en las zonas rurales que ven amenazados sus empleos o ya lo han perdido.
  3. Creación de una normativa de alivio financiero en préstamos personales y empresariales, con la banca y microfinancieras, que permita evitar la mora, la acumulación de intereses y la penalización por medio de la reclasificación de los clientes, lo cual limita la capacidad de los productores de obtener financiamiento para este ciclo agrícola.

Estas medidas permitirán crear un mejor ambiente para la producción y responder a los diversos escenarios que podrían darse con el avance del COVID-19, así como mitigar mayores efectos negativos en nuestra capacidad exportadora, la generación de empleo y el precio final de los productos que consumen las familias nicaragüenses, termina diciendo el comunicado.

Deja un comentario

%d