La Habana | EFE.-
La Unión Europea protegerá «con todos los medios a su alcance» a sus empresarios que apuestan «por crear riqueza y prosperidad en Cuba» frente a la amenaza del recién activado título III de la ley Helms-Burton, que permite demandar en cortes de EEUU a empresas extranjeras con intereses en la isla.
Así lo aseguró este jueves el embajador de la UE en Cuba, Alberto Navarro, quien recordó la posición unánime del bloque -primer inversor en Cuba- y sus veintiocho estados miembros, que consideran que la aplicación extraterritorial de esa legislación estadounidense «es ilegal y contraria al derecho internacional».
El diplomático español realizó esta advertencia durante la celebración del Día de Europa en La Habana, el segundo que se festeja en el país caribeño desde la entrada provisional en vigor a finales del 2017 del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación entre la UE y la isla.
La normalización del marco bilateral, que supuso el fin de la restrictiva «posición común» que rigió las relaciones entre Europa y Cuba durante dos décadas, ha redundado también en el ámbito comercial.
Las exportaciones europeas crecieron el año pasado un 7,4 % hasta los 2.200 millones de euros y el intercambio comercial se elevó a más de 2.500 millones, «más de un tercio del comercio exterior cubano», según Navarro.
El pasado día 2 EE.UU. activó el título III de la ley Helms-Burton, que permite a los estadounidenses demandar en sus tribunales a compañías que se beneficien de terrenos o inmuebles que les fueron expropiados en la isla tras la Revolución de 1959.
La UE ya adelantó su intención de aplicar el «estatuto de bloqueo», que prohíbe la aplicación en territorio comunitario de las sentencias en EE.UU. sobre el Título III y permite a los demandados recibir indemnizaciones en cortes europeas.
Tampoco se descarta una posible demanda ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), una medida a la que el bloque europeo ya recurrió cuando se aprobó la Helms-Burton en 1996 y que no fue retirada hasta que Washington se comprometió a mantener congelado el citado Título III.
En el plano de las relaciones políticas, el embajador europeo destacó los avances en el último año, con la celebración del primer Consejo conjunto Cuba-UE en el que se acordó el establecimiento de cinco diálogos políticos que ya se han celebrado: derechos humanos, medidas coercitivas unilaterales, no proliferación, tráfico ilícito de armas ligeras y desarrollo sostenible.
El segundo Consejo bilateral, avanzó, está previsto para septiembre próximo en La Habana, adonde acudirá la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, en la que será su cuarta visita oficial a la isla.
«Con respeto mutuo y cada vez con mayor confianza estamos reforzando de manera sustancial nuestras relaciones siempre en beneficio de nuestros ciudadanos que son y deben ser siempre el centro de nuestras acciones», sostuvo Navarro.
Además, a los diálogos celebrados en los últimos meses seguirán «en breve» rondas sectoriales sobre agricultura, energías renovables y cambio climático.
Está programada asimismo una visita a la isla a finales de junio del comisario europeo de Desarrollo, Neven Mimica, «en otra muestra de que Europa apuesta por el diálogo y por la cooperación con Cuba», recalcó el jefe de la delegación europea.
Navarro destacó el incremento «muy sustancial» de los proyectos europeos de cooperación en la isla y citó los últimos acuerdos suscritos, que se elevan a 60 millones de euros en ámbitos como la agricultura sostenible, las renovables, modernización de la economía cubana o la digitalización y el gobierno electrónico.
En su discurso, Alberto Navarro defendió que a nivel global «la UE es hoy más necesaria que nunca» no solo para sus ciudadanos, sino también «para todos aquellos que quieren trabajar de forma cooperativa para reforzar las Naciones Unidas, el multilateralismo, la paz o el desarrollo sostenible».
«Los europeos apoyamos también en todo el mundo el comercio justo y libre, el estado de derecho, los derechos humanos y la democracia», valores que inspiran las relaciones del bloque «con otros países y regiones», agregó.