Ciudad de Guatemala | EFE.-
Guatemala recibió este sábado los primeros cuerpos de los migrantes fallecidos en el accidente de tránsito registrado el pasado 9 de diciembre en el sureste de México, donde 56 personas perdieron la vida y más de 100 resultaron heridos.
Los cuerpos de cuatro migrantes guatemaltecos fallecidos arribaron a la Fuerza Aérea Guatemalteca a las 23.34 hora local (5.34 GMT del domingo), repatriados desde México, según constató Efe.
El trágico accidente, ocurrido el 9 de diciembre en el estado de Chiapas (sureste), dejó 56 personas perecidas y 114 lesionadas.
La coordinación con las familias de los fallecidos para la entrega este sábado de sus restos estuvo a cargo de la Cancillería guatemalteca, según informó en sus canales oficiales el Gobierno que preside Alejandro Giammattei.
Los nombres de los cuatros migrantes repatriados este sábado no fueron divulgados por las autoridades guatemaltecas, que anunciaron el retorno unas horas antes de que se concretara.
Los cuerpos fueron bajados del avión e introducidos en una carroza fúnebre, de donde serán trasladados a sus respectivos pueblos natales en el interior del territorio guatemalteco.
De acuerdo al Gobierno, los migrantes pertenecen a los departamentos de Chimaltenango, en el centro del país, y San Marcos, al oeste de la nación centroamericana y colindante con México.
El accidente se produjo cuando un tráiler que transportaba migrantes impactó contra el muro de un puente peatonal, durante su trayecto por territorio chiapaneco, presuntamente debido a que el conductor perdió el control por viajar a exceso de velocidad.
Los más de 150 migrantes que se transportaban en el camión tenían como objetivo cruzar México para llegar a Estados Unidos.
Según las autoridades mexicanas, se ha confirmado otros 10 fallecidos de nacionalidad guatemalteca, y casi un centenar de los heridos también procedían del país centroamericano.
Cada año más de 500.000 guatemaltecos, hondureños y salvadoreños intentan emigrar de manera irregular a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida, para huir de la pobreza y la violencia en sus países natales, con base en cálculos de expertos y de organismos internacionales.